Cuando nos imaginamos una reunión, solemos tener varias ideas negativas de lo que puede llegar a ser. Las reuniones suelen ser demasiado serias, monótonas y llenas de tensión. Tensión que es directamente palpable en el ambiente. Por eso, para liberar todas las malas energías, hemos querido jugar con el espacio de trabajo. Un entorno único, donde divertirse con la creatividad en la sala de reuniones.
Sin pensárnoslo dos veces, en nuestra sala de reuniones colocamos un tablero de Davesport (una mesa de Ping pong) para dar alegría a las reuniones. Queríamos que cada estancia fuera recordada por todos los que se acercaran por la oficina.
Como un auténtico partido de ping pong, el combate dialéctico da paso a cada jugador, fluyendo las ideas de lado a lado de la mesa, donde cada uno de ellos trata de defender y revalidar sus ideas. Algunas ideas entran dentro, otras dan en la red y algunas salen fuera, pero sólo suben al marcador las que son válidas.
Las miradas de todos los jugadores se fijan en la pantalla de televisión. Esta pantalla juega un papel fundamental en el ambiente creativo de la sala. Una PSP gigante, como las que usábamos en la infancia, hace que cautive la atención de todos. Nuestras presentaciones quedan bastante más activas y divertidas.
La creatividad nos permite dotar a elementos cotidianos de una nueva vida, una nueva forma de verlos.